Datos de la imagen

En el año 1960, Tona Sepulcre Guilabert (nacida en 1905) abrió una pequeña tienda en la carretera de Matola. Al poco tiempo, debido a la delicada salud de su marido pasó el relevo a su hija Rosita Boix Sepulcre (nacida en 1933), fue el inicio de la Venta Rosita.
Comenzó la tienda con comestibles y una pequeña carnicería con venta de carne de cordero pues el marido de Rosita, Pepe Miralles, pastoreaba un rebaño de corderos criados con el pasto del campo, que guardaba muy cerca de la Venta.
Los clientes venían a comprar el pan casero, traído del Horno de Carmelo, latas de berberechos, navajas, etc, y también salats, mojama y hueva. En temporada, con grandes seras se vendían habas tiernas.
Añadió un cafetera y fue ampliando la Venta añadiendo un salón donde se servían chuletas a la brasa y ensaladas.
Referir que la tía Tona Sepulcre pidió al Ayuntamiento que pusieran puestos de flores en el Cementerio Viejo, cuando aún no los había.
Agradecimientos a Engracia Miralles Boix, por su inestimable ayuda con la historia de su familia.
Bolsa de tela de 38 x 34 cm. Publicidad del restaurante Rosita, anteriormente era conocido como la Venta Rosita. En la carretera de Matola.
Las imágenes exhibidas en esta página son propiedad de sus autores. Aquí se muestran exclusivamente con fines científicos, divulgativos y documentales. Cualquier otro uso fuera de esta página está sujeto a las leyes vigentes.
Añadir nuevo comentario