González Serna, Carlos

GONZÁLEZ SERNA, Carlos (Elche, 10-III-1965). Licenciado en Derecho por la UNED, como abogado es especialista en derecho del consumidor, en particular la protección contra los abusos bancarios, el derecho de familia y sucesiones, así como, el derecho de nacionalidad y extranjería. Ingresó en el PSPV-PSOE en 1986. En 1995 y hasta 2004, con Diego Maciá como alcalde, fue teniente de alcalde, portavoz del Grupo Municipal Socialista, concejal de Tráfico y responsable de las áreas de Recursos Humanos, Hacienda, Contratación y Compras, Seguridad Ciudadana, Turismo, Promoción Económica. Fue también vicepresidente tanto de la Sociedad Municipal INTESA como de PIMESA. Miembro de la Ejecutiva Local de su partido en Elche durante el mismo periodo. Diputado  al Congreso por la provincia de Alicante entre 2004 y 2011, fue portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Socialista en la Comisión de Interior entre 2004 y 2011 y participó activamente en las Comisiones de Justicia, Fomento y Seguridad Vial. En septiembre de 2014, tras unos años dedicados al ejercicio de la abogacía, se presentó a las elecciones primarias del PSPV-PSOE para elegir al candidato socialista a la alcaldía de Elche. Las primarias se celebraron el 19 de octubre de 2014 y ganó con el 48, 87% de los votos. Fue elegido alcalde el 13 de junio de 2015, con el apoyo de los cuatro concejales de Compromís y los dos de Ilicitanos por Elche. Es también conocida su afición a participar en carreras de fondo. Candidato a la alcaldía de Elche por el PSPV-PSOE en las elecciones municipales de 2019 y alcalde en un segundo mandato (2019-2023). Candidato a alcalde en las elecciones municipales del 28 de mayo de 1923. La coalición entre Partido Popular y Vox en esas elecciones (11 más tres concejales), a pesar de los 12 conseguidos por el PSOE le llevó a la oposición, en la que se mantuvo como edil.

"Soy hijo de un ilicitano de Jerga, es decir, de una persona que vino a vivir a Elche desde Almería. Concretamente, desde un pueblo que se llama Gérgal, mi madre nació y se crio en el barrio del del Raval. Mi padre se llamaba Justo González Espinar y mi madre Carmen Serna Santiago. Él tenía un taller de reformas de hormas de zapato. Por lo tanto, estaba vinculado a la industria del calzado y ella era ama de casa. Mi abuelo paterno se llama Justo González Márquez y mi abuela Carmen Espinar Gómez. Por la parte materna, mi abuela se llamaba Pilar Santiago y mi abuelo Antonio Serna. Mis dos abuelas trabajan ambas en casa, mi abuelo paterno trabajaba en el registro civil de Gérgal y llegó a ser el alcalde del pueblo. A mi abuelo materno no lo conocía, por lo que no puedo decir a qué se dedicaba. Tengo dos hijos, un varón de 28 años que se llama Carlos González y una mujer de 24 años que se llama Lucía González. Los dos han finalizado sus estudios y los dos trabajan en las circunstancias que el trabajo permite Trabajar hoy en día a los jóvenes, es decir, “trabajan cuando pueden”.

A los 10 años me gustaba jugar en las obras de soterramiento del tren. Yo vivía muy cerca de allí, lo que antiguamente se conocía como arriba de la vía, en Carrús. Los niños que vivíamos allí, íbamos a jugar a la construcción del túnel por donde tiempo después, iría el tren. Me encantaba jugar allí, lo que pasa es que aquello era siempre un polvorín y cada vez que iba a jugar al túnel, que no debía estar bien vallado porque nos colgábamos, recibía una bronca de parte de mi madre al volver a casa.

Soy licenciado en Derecho por la Universidad Nacional de Educación a Distancia y he ejercido antes de ser alcalde. Aunque he tenido varios trabajos. Sí que he estudiado y trabajado a la vez, mi primer trabajo mientras estudiaba fue de administrativo y lo compatibiliza con mis estudios de derecho. Cuando yo estaba estudiando y tenía capacidad de adquirir conocimiento, el Conservatorio en Elche no se había creado, por lo que no pude aprender a tocar ningún instrumento musical. Sobre aprender otro idioma, he aprendido inglés, pero no sé inglés. “A lo largo del tiempo, si no prácticas un idioma que no es el tuyo, vas perdiendo el conocimiento que has ido aprendiendo y eso te hace olvidarlo”. Aprendí inglés en el colegio y en la formación post obligatoria, pero lo he ido perdiendo por falta de uso. Mi lengua materna es el castellano, a mi pesar. Me hubiera gustado que fuera el valenciano, o me hubiera gustado ser valenciano parlante, pero no lo soy.

Hay muchos profesores que han influido en mi formación académica y personal. Hay muchos, pero si me tuviera que quedar con uno, la persona que me marcó más fue Pepe Belso, conocido como José Belso Castaño. Tiene una calle dedicada en la ciudad. Falleció hace unos años, y llegó a ser director del instituto Pedro Ibarra. A mí me dio clases de Literatura en la Academia San José de Calasanz cuando estudiaba educación general básica. Me marcó porque fue la persona que me hizo admirar, valorar y disfrutar de la poesía de Miguel Hernández. En definitiva, me hizo descubrir y amar dicha poesía y, al mismo tiempo, tuvo una influencia personal sobre mí muy intensa.

Estudié BUP y COU en el instituto Virgen de la Asunción. Mi época de estudiante en el instituto la recuerdo con mayúsculas, feliz. Descubrir el mundo, hacer amistades e ir adquiriendo libertad y al mismo tiempo, aprendiendo. Recuerdo que en primero y segundo de BUP, una de nuestras actividades favoritas, era jugar a algo muy bruto. Jugábamos tanto chicos como chicas. El juego se llamaba “churro, media manga, mangotero”, se trataba de un juego por equipos de hileras de cuatro a seis personas, en el que tu cabeza debía estar apoyada en el trasero de la persona de delante y, los que no pagaban, saltaban por encima de las personas que sí que pagaban. El juego consistía en que la filera de abajo no se derrumbara y para librarse se debía de señalizar una parte del brazo (churro, la parte del hombro, media manga, el antebrazo y mangotero la parte de la mano). Si los de abajo, que no veían lo que señalaba los de arriba, acertaban, pagaban los de arriba y se repetía el juego. Era un juego muy divertido, pero también muy bruto. “Recuerdo llegar a casa con dolor de espalda en muchas ocasiones”.

No sabría contestar con certeza de dónde me viene mi inclinación política, yo creo que me viene de todas mis vivencias. Desde la de estudiante, con profesores progresistas que te hacían ver el mundo de una determinada forma hasta el silencio del domicilio familiar. En mi época, no se hablaba de política en los domicilios familiares porque hablar de eso era algo negativo, ya que el franquismo había metido en las cabezas de nuestros padres que había que evitar la política. Mi orientación política viene también del fusilamiento de mi abuelo en la Guerra Civil. Mi abuelo paterno, que fue alcalde de su pueblo, fue fusilado de forma injusta en la Guerra Civil. También podría venirme de la Victoria del Partido Socialista de Felipe González en 1982, ya que generó un caudal de ilusión en España. Yo tenía apenas 17 años, cuando Felipe González ganó las elecciones, y me sentí atrapado por esa ilusión. En definitiva, viene de un poco de todo lo que he vivido y de la manera en la que me he criado.

Hubo un grupo de compañeros en el Partido Socialista que apostaron por mí para ser el candidato que se presentará a las elecciones, justo después de que el Partido Socialista perdiera por primera vez en su historia unas elecciones comarcales. Había que recuperar la alcaldía y pensaron en mí cómo la persona más adecuada para encabezar la lista. También, hubo otras personas que pensaron en otros miembros del partido como posibles candidatos. Entonces hubo unas primarias en 2014, en las que, por una parte, unos compañeros impulsaron mi candidatura y otros impulsaron hasta otras tres candidaturas más, y de las cuatro, la mía salió la vencedora. Fui candidato como consecuencia de ganar unas elecciones internas, es decir, primarias del Partido Socialista, y después, llegué a alcalde gracias al voto de los ciudadanos ilicitanos y tras sumar la mayoría suficiente para ser alcalde.

He descubierto las fiestas gracias a la alcaldía, conocía las fiestas de mi ciudad y antes de ser alcalde participaba en ellas, pero ser el alcalde de la ciudad me ha permitido descubrir las fiestas, conocerlas desde dentro, conocer a sus protagonistas, sus dificultades, sus ilusiones, conocer el trabajo desinteresado que realizan algunas personas. Entonces he conocido las fiestas por dentro al ser el alcalde de la ciudad y eso me ha hecho ser muy apasionado de las fiestas ilicitanas y por la “festa”, que es el Misteri. Intento vivir las fiestas como uno más, de hecho “me he despojado en muchas ocasiones de la figura de alcalde, con los privilegios que ellos conlleva en las fiestas para intentar vivirlas como yo digo a pie de calle”, es decir, como un ilicitano más.

Me gusta estar informado, ya no es por ser alcalde, sino por ser un ciudadano que quiere saber lo que pasa en su localidad y en el país. Necesito saber qué pasa cada día y ahora en esta vida digitalizada, necesito saber al minuto qué es lo que pasa. Para mí, El País, es el periódico más consistente y plural. Mi emisora favorita es la SER. Aunque sé puede levantar alguna ampolla. Y veo informativo de un tanto conservadores como puede ser el de Antena 3, me gusta su estilo de informativo, si bien percibo con claridad el sesgo ideológico que tienen. Me atrae el ritmo del telediario. Además, me gusta como hacen el informativo Vicente Vallés y Sandra Prado. También leo a veces El Mundo, ABC, como periódicos de nivel nacional, pero considero que el mejor es El País. A nivel local, solo hay un medio escrito, El Información. Luego suelo ver los dos canales de televisión, es decir, Teleelx y la televisión de la cadena SER. Además de escuchar todos los informativos de Onda Cero, Teleelx, Radio Marca a nivel local.

En mi época de estudiante leía mucho, devoraba libros, pero no sabría decir cuál es el que más me gusta. Actualmente, me gusta releer cosas, aparte de que leo autores y obras que caen en mis manos circunstancialmente, prefiero comprarlos. Me gusta releer a Federico García Lorca, Antonio Machado, Miguel Hernández, especialmente, a este último. A mí personalmente me gusta releer.

Siempre hay referentes, para mí siempre ha habido políticos que me han impresionado como puede ser Felipe González. He conseguido verlo una vez en persona. Me impresionaba la figura pública de este en los años 80, cuando fue presidente del gobierno. Luego también lo fue Zapatero, persona a la que sí he conocido y con el que sí he tratado. “Considero que fue una persona muy maltratada por los medios de comunicación, por la derecha mediática y por la derecha política”. Otro referente también podría ser el exalcalde Diego Macià, que fue compañero de trabajo. Este último me marcó por su seriedad y compromiso. He tenido también muchos referentes anónimos, como pueden ser: compañeros de trabajo, de partido y familiares.

Fuera de mi lugar de trabajo me gusta hacer muchas cosas, lo que más me gusta es practicar deporte, ya que soy corredor. He hecho unas cuantas medio maratones y unos cuantos maratones. Intento buscar tiempo libre debajo de las piedras para poder salir a correr un rato. Aparte, suelo ir al cine sea en la gran pantalla o en las plataformas mediante suscripción que tienen tanta fama hoy en día. Ahora hay series que te enganchan, si tuviera que decir cuál es mi favorita hoy en día, diría que Peaky Blinders. Adoro pasear por el campo, ya que considero que tiene un atractivo y unas características de soledad, tranquilidad, paz, aromas e imágenes que me atrapan. De vez en cuando también intento ir al teatro porque me impresiona y me transmite mucho, no solo despierta mi mayor admiración porque un actor o actriz de teatro llega más que cualquiera que puedas ver desde la pantalla de tu televisor, sino que “escuchas sus voces sin filtro”.

Entrevista de José Antonio López Diego, octubre del 2022.