Datos biográficos
CAÑIZARES RIQUELME, Vicente (Hondón de las Nieves, 16-VII-1928 - Elche, 23-VIII-2022). Hijo de Vicente Cañizares Pérez y de Consuelo Riquelme Segura. Un matrimonio con cuatro hijos: Vicente, Paco, María e Isabelita. Su padre se dedicó a la venta de vino que transportaba con carro y mulas hasta Alicante, a la bodega Madrid, dedicada a la exportación. En 1935 la familia se vino a Elche, a la calle Teodoro LLorente nº 2, porque los camiones le habían dejado sin posibilidad de mantener su trabajo. En Elche trabajó con Miguel Román Torres en las chimeneas. Vicente fue a estudiar a las Graduadas con un maestro, don Manuel, al que recuerda bueno y humano. Algo que no ha olvidado es que su maestro le dijera a su madre que era una lástima que el niño no pudiera seguir en la escuela. Cuando llega la guerra su padre se va al frente, su madre comienza a trabajar en Ferrández y Vicente, el mayor de los cuatro hermanos, con 9 años, tiene su primer trabajo en la fábrica de Ripoll, en tiempo de guerra con tres turnos: de seis de la mañana a 14 horas; de 14 a 22 horas y de 22 horas a seis de la mañana. Recuerda también que más tarde habría una ley que no permitía trabajar a los menores de 14 a partir de las 16 horas para que pudieran ir a la escuela. Mientras su madre trabajaba en Ferrández, Vicente tenía que llevar a su hermana pequeña, Isabelita, metida en un cajón de madera que arrastraba hasta la fábrica para que su madre le pudiera dar el pecho. El padre resultó herido en el frente por una bomba en Siete Aguas, en la provincia de Valencia. Otra manera de salir adelante fue vender dátiles en la estación de ferrocarril a los viajeros. El niño se dio cuenta que su madre no sacaba beneficio y lo que se le ocurrió fue poner los dátiles buenos en lo más alto del cartucho y los verdes no comestibles en la parte inferior para que no se vieran. Lo recuerda como el ingenio que crea la necesidad. Después de la guerra trabajó en otra fábrica que estaba en la misma calle donde vivía. La fábrica de Soler, Chinchilla y Ortega. Francisco Ortega se separó y montó la suya y se llevó con él a Vicente para las oficinas. Y lo acabó despidiendo porque se enteró que el hermano de Vicente, Paco, fabricaba zapatos para recién nacidos y que su empleado le ayudaba al hermano, aunque no compitieran al tratarse de productos distintos. Vicente no llegó a entender la actitud de su jefe y se presentó en el Sindicato Vertical porque reclamaba poder trabajar. Debía tener entonces unos 18 años, en torno al año 1946. Hizo el servicio militar en Paterna, dos años, también en oficinas al saber mecanografía y el teniente que tuvo de jefe, el teniente Aparicio se despidió de él diciéndole: "He tenido peores soldados que tú", una manera muy militar de decirle que estaba satisfecho. Tiempo después lo llegó a encontrar en su pueblo, en Padrón. Al terminar el servicio militar comenzó su etapa como representante de calzado viajando en tren, en tercera, con tres viajes anuales, dos generales y uno "de repaso" para ver de nuevo a los clientes más importantes, en León y en las cuatro provincias gallegas. Representó a los fabricantes Salvador Serrano "El Nene" de calzado de señora y Ramón Sánchez Brotons de zapato de caballero. En 1956 se casó con María Villanueva Puig y el matrimonio tuvo cinco hijos: Vicente, Francisco, María Teresa, Alejandro y Cristina.
De viajar en tren y en tercera pasó a comprar su primer coche, un renault con matricula de Valencia y poderse comprar un piso en la calle La Torre. Cuando le empezó a ir bien, se asoció con su hermano Paco a finales de la década de los cincuenta. Pensaron entonces que necesitaban una marca porque el calzado se cotizaba mejor con marca que sin ella, según Vicente, hasta un 10% más en beneficios. Pensaron en el nombre y desecharon Cañi por lo de la España cañí y se quedaron con Quelme, pero con K, porque era una letra con mucha más fuerza. Y así nació Kelme, el 26 de julio de 1960 a nombre de Francisco Cañizares Riquelme y con domicilio en la calle Joaquín García Mora nº 41. La marca se registraba para distinguir "calzados en general y sus accesorios" comprendida en la clase 50 del Nomenclátor oficial. Comenzaron los dos hermanos fabricando primero calzado de señora y más tarde de señora y de caballero. Primero con 25 y pocos años después con 120 trabajadores. Vicente además compró y vendió solares y plantas bajas. Compró un solar de 4.000 metros que luego albergaría hasta cuatro fábricas. En un viaje en tren entre Madrid y Barcelona, Vicente coincidió con un judío cuyo nombre no recuerda pero que había sido coronel en el ejército israelí durante la Guerra de los Seis Días en junio de 1967. Aquel judío abrió a Kelme las puertas de algunos países del entonces llamado Telón de Acero. Vicente volvió a encontrar una fórmula mágica para poder entrar en países a los que los españoles les estaba prohibido viajar. Estando en París, fue a la embajada española y reclamó un segundo pasaporte explicando que había perdido el suyo. Desde la embajada pidieron informes a la policía de Elche y Vicente consiguió sus dos pasaportes, uno para entrar en países como Hungría, Bulgaria o Rumanía y otro para volver a España. Recuerda que funcionaba una fórmula de permuta, es decir, compraban y vendían por la misma cantidad, de lo que se encargaba su amigo el judío. Eso le permitió a Kelme vender de una tacada 50.000 pares en países como Hungría, Polonia, Rumanía o Bulgaria. Operaciones que solo eran conocidas por los dos hermanos Riquelme y por el contable de la empresa. Empresarios del calzado ilicitanos pensaba que los hermanos vendían en países como Francia pero no en países del Este, donde Kelme fue pionero entre los empresarios de calzado ilicitanos. Los hermanos mandaban cajas de calzado a París y desde París se llevaban a aquellos destinos. Calzado muy clásico de caballero y de señora. Hasta el punto de que el 90 de la exportación de aquellos primeros años de la década de los setenta fue a los países del Este. Vicente recuerda aquel golpe de suerte como esas inspiraciones que se tienen en la vida y que hay que saber aprovechar.
Diego Quiles Navarro fue el ojo derecho de su hermano Paco porque de bien pequeño le llevaba la leche de la vaquería del padre de los hermanos Quiles. Así se ganó su cariño. Diego quisó entrar a trabajar en la fábrica de los hermanos Cañizares como oficinista, aunque no sabía ni contabilidad ni mecanografía, pero Paco aceptó al chiquillo. Cuando volvió de la mili, Diego Quiles les propuso montar un almacén para los clientes pequeños de la fábrica y aunque lo lógico hubiera sido a tres partes, Paco aceptó también que el 50% fuera para Diego y el otro 50% para los dos hermanos Cañizares. Tiempo después, Diego hizo entrar en la sociedad a su hermano Pepe y otra vez Paco fue condescendiente: se le dio un 10% pero a dividir entre Diego y los dos hermanos Cañizares. Tiempo después, la fábrica acabó siendo vendida por Vicente y Paco a Diego Quiles por una peseta. Vicente piensa ahora que se equivocaron entonces. Paco acabó poco menos que arruinado y murió poco tiempo después por un cáncer. Vicente tuvo después una muy mala experiencia con Pablo Serna Fuentes con el negocio de un solar y una deuda con el Banco de Alicante. Coincidió que el mismo día en que Vicente fue a Alicante a hablar con el director de la oficina principal de dicho banco, aquel hombre se pegó un tiro esa misma noche. Vicente recuerda tanto la estafa de Pablo Serna Fuentes como el apoyo exclusivo que recibió por parte de Pepe Quiles Navarro. Vicente fue también el impulsor de un equipo ciclista amateur que con los años y ya con los hermanos Diego y Pepe Quiles Navarro se convertiría en el famoso club profesional de Kelme. Comenzó organizando carreras ciclistas para jóvenes aficionados con la ayuda económica de empresarios como Pascual Serrano, Roque Sepulcre o Pepito Pinet. Hasta el director en Elche de Banesto, Armando Maciá Mañuz le ayudó en una carrera. Carreras cuya organización podía costar hasta las 30.000 pesetas en los años sesenta. Empresarios que trabajaron junto a los hermanos Paco y Vicente Cañizares Riquelme los recuerdan siempre como muy buena gente.
FUENTE: Testimonio de Vicente Cañizares Riquelme grabado por Miguel Ors Montenegro el 5 de abril de 2019.
Añadir nuevo comentario